martes, 4 de abril de 2017

Como una regadera

Es terapeútico tener una mascota. Es recomendable para los niños, especialmente para los hijos únicos y para los pequeños más retraídos. Es posible. Sin embargo nadie habla del estrés. Si, el estrés que producen 45 kg que saltan por encima de ti, ponen las patas en la mesa, ladran para que abras la puerta, te lamen en el momento menos conveniente, se frotan el pelaje contra tu pantalón negro, tiran el vaso de leche de la mesa, se comen la cena de los niños etc Hoy tuve mi última experiencia con el miembro canino de nuestra unidad familiar, visita al veterinario por una conjuntivitis recidivante. Allí me presento yo, con mis tacones y abrigo (todavía hace frío por la mañana a la ausencia del sol) esperando en la puerta, sujetando al chucho mientras mantenía la compostura y rezaba para que la situación no acabase en un esguince de tobillo. Tira que tira. Entro a la sala de espera como vaquero en el viejo oeste, arrastrada por la bestia. La veterinaria me mira. "Vaya, gordo, qué fuerza tienes!" (A mi todavía no me ha dirigido la palabra, no existo). Dos minutos mas tarde "Uy, uy, este perro está como una regadera". ¿Lo dudaba alguien? Lo difícil es mantener la cabeza en su sitio, para todos. También para los perros.

lunes, 23 de marzo de 2015

Como jode la vida. Cuando te besan y el sabor caliente de la lengua ajena te deja indiferente. Como jode la vida.

miércoles, 1 de octubre de 2014

Vuelven las peonzas

Vuelven las peonzas.  Ya sé que ya volvieron el año pasado, antes de las canicas y antes que las gomas para pulseras.  Han vuelto otra vez.  Algo así como rescatar en el último momento esa prenda que ya habías desechado en la bolsa de Caritas.  Hay en todos los colores con una docena de modelos: cobra, supercar, mini car... Se vuelven locos.  Las tiran en la consulta del médico.  Hacen una pirueta y la cogen con la cuerda mientras tú intentas pagar el pan sin soltar al niño de la oreja.

Cuando tú y yo eramos pequeños, dibujamos un círculo. Un círculo mágico y jugábamos a sacar a otras peonzas de él.  Como en la vida misma.  Te expatrian. Te exilian. Te echan a codazos y lo ves venir pero permaneces inmóvil, pendiente de cual será el próximo movimiento.  Tenso hasta que te toca volver a tirar.  Nunca jamás tirabas la peonza en casa.  Ni se te ocurría. Inimaginable.

Ayer por la noche, descubrí porqué.  Y es que hay algo que debes saber:  Todas, lee atentamente,    T- O- D- A- S, joden el parqué.

Hasta el infinito y mas allá

Si hay algo por lo que te puedas sentir mal, te sentirás fatal.  Ayer mismo.  Después de salir de casa a las 9.00 y llegar a las 19.50 (prácticamente 11 horas después).  Me enfrento a un pequeño ser, lleno de rizos, tantos que su cuerpo parece diminuto frente a esa madeja tostada infinita que mira lánguidamente a una tortilla francesa durante ??? algo más de una hora.  Allí mirando, insistiendo... porque a mi lo que de verdad me gusta es la tortilla de patata. Sin cebolla.

jueves, 7 de agosto de 2014

Be water, my friend

Whatsapp nos ha cambiado la vida. Ya no hay excusa; no hay lugar donde esconderse; siempre puedes mandar un "wazap".  Bueno, siempre y cuando no se haya desconfigurado de tu dispositivo móvil.  Proporciona comunicación instantánea, gratuita y  múltidireccional entre otros atributos.  Una revolución.  Sin embargo el aspecto del ivnento que más me gusta son "los estados".  Abres la pestaña de contactos y empiezas a mirar todas esas caras conocidas, olvidadas y a leer sus estados.  Unos son auténticas declaraciones de intenciones; otros comentarios lapidarios sobre el momento de su vida y la de los demás; otros prácticos como "hi! I'm using..."; otros "en el cine" de manera continuada, non-stop, ni para dormir, ni para ir al baño, siempre en el cine. O  "Sin estado".  Yo pensaba que se trataba de una declaración anarquista, un gesto de protesta frente a la situación de este lugar inombrable donde vivimos... pues no, simplemente, eso "sin estado".  Como vividora, mi estado durante mucho tiempo fue viviendo.  Eso, estoy viviendo. Sin más, sin adornos, sin coartadas.  Hasta que sentí que Bruce Lee Fu Jan me hablaba a mi: "Be water, my friend".

lunes, 11 de abril de 2011

El vestido negro

"Hola, quiero hacer una fiesta el viernes..." , director general, 20:30 miércoles. 

Yo ya estoy en otro planeta.  Imposible, ¿será verdad que me esté invitando a una fiesta el viernes?, "fenomenal" contesto, ilusionada, "díme".  Y sigo volando.  Espero que mi novio me pueda acompañar, aunque con él nunca se sabe, pero seguro que se anima.  La niña.  Mi madre, se lo digo a mi madre, seguro que no le importa.  Es genial que cuente conmigo.

"Si, mira hemos cumplido el objetivo de marzo y me gustaría hacer una fiesta para todos los empleados.  ¿Crees que dará tiempo a organizarlo? En plan bien, tú ya sabes... es poco tiempo, solo un día,  pero ... ¿a qué hora convocamos a todos?"

¡y yo pensando en el vestido negro!

lunes, 28 de marzo de 2011

Haciendo las paces

Soy como Bridget Jones (es que ayer pusieron la peli en la tele y me quedé atónita-- ¿quién narices ha escrito mi vida?), realmente hay algunas diferencias entre nosotras como que yo no soy una prestigiosa periodista, ni mi novio está forrado, ni soy rubia, ni vivo en Londres, ni tengo treinta años.... vamos que mi situación es algo peor que la de Bridget, pero si nos conociesemos nos caeríamos bien, básicamente cambiamos de opinión como de ropa interior.

Estoy confeccionando un catálogo virtual de uso privativo, mental, de mis amores truncados, inaccesibles y olvidados.  No estoy segura de que sea cosa mía, están apareciendo como capullos en la primavera (por favor, aplíquese una lectura entre líneas) o como gotas de rocío sobre la arena del desierto.  Su presencia es fugaz, inquietante y apaciguadora.  No sé por qué aparecen, por qué vuelven, por qué me arrancan una sonrisa lacrimógena y por qué me provocan una ternura infinita.  Alguién les ha convocado y vienen con total libertad, saludan, pronuncian algunas palabras y se marchan. Yo permanezco sentada, sonriendo, haciendo las paces con mis últimos veinte años.
http://www.youtube.com/watch?v=bs73eGP0BEM