jueves, 7 de agosto de 2014

Be water, my friend

Whatsapp nos ha cambiado la vida. Ya no hay excusa; no hay lugar donde esconderse; siempre puedes mandar un "wazap".  Bueno, siempre y cuando no se haya desconfigurado de tu dispositivo móvil.  Proporciona comunicación instantánea, gratuita y  múltidireccional entre otros atributos.  Una revolución.  Sin embargo el aspecto del ivnento que más me gusta son "los estados".  Abres la pestaña de contactos y empiezas a mirar todas esas caras conocidas, olvidadas y a leer sus estados.  Unos son auténticas declaraciones de intenciones; otros comentarios lapidarios sobre el momento de su vida y la de los demás; otros prácticos como "hi! I'm using..."; otros "en el cine" de manera continuada, non-stop, ni para dormir, ni para ir al baño, siempre en el cine. O  "Sin estado".  Yo pensaba que se trataba de una declaración anarquista, un gesto de protesta frente a la situación de este lugar inombrable donde vivimos... pues no, simplemente, eso "sin estado".  Como vividora, mi estado durante mucho tiempo fue viviendo.  Eso, estoy viviendo. Sin más, sin adornos, sin coartadas.  Hasta que sentí que Bruce Lee Fu Jan me hablaba a mi: "Be water, my friend".

No hay comentarios:

Publicar un comentario